Cayetana

Cayetana

lunes, 11 de abril de 2016

NUNCA ME DIGAS QUE NO PUEDO HACERLO..

"Nunca me digas 

que no puedo hacerlo.

A mí, que he bailado 

con dos corazones.

Y he respirado

con cuatro pulmones.

A mí, que he sido hielo

fuego y viento.

Que he llevado 

en mi vientre

el peso de dos mundos,

y he parido 

la vida a gritos.

Que he abrazado

a la tristeza sin miedo.

Y he llorado sonrisas.

A mí no me digas 

que no soy capaz 

de algo.

O de todo."

© 2016 Eva López Martínez


sábado, 9 de abril de 2016

ESCUCHA CON ATENCIÓN

Escucha con atención
cualquier cosa que tus hijos
quieran decirte,sin importar
qué sea.
Si no escuchas con entusiasmo
las cosas pequeñas,
cuando son pequeños,
no te dirán las cosas grandes,
cuando sean grandes,
por que para ellos se habrá
tratado siempre de
cosas importantes.

Catherine M. Wallace



viernes, 8 de abril de 2016

¿Cómo se relacionan las personas manipuladoras?

Sin darnos cuenta, podemos estar inmersos en relaciones con personas manipuladoras que cambian nuestro modo de pensar o de actuar, por su propio bien.
Existen diferentes “categorías” dentro de los manipuladores, según el control que ejerza ese individuo sobre nosotros. Si esa presión es muy grave, los expertos la denominan: “perversidad narcicista” y de ello hablaremos en este artículo.
Seguro has visto varias películas, has leído libros o escuchado historias sobre personas que manipulan a sus parejas, a sus hijos, a sus amigos, etc. Este tipo de personalidad existe en todas las familias y no siempre estamos al tanto de la situación. Es más, hasta podemos ser víctimas de personas manipuladoras ahora mismo y no saberlo.
Los perversos narcicistas, como llaman algunos psicólogos a este perfil, son aquellos que constantemente están diciendo al otro qué tiene que hacer, de una manera sutil (o no), pero con una efectividad que realmente asusta, a la vez que coartan su libertad.
Cuando se habla de un individuo perverso, lo es las 24 horas del día, sin distinción. La relación con su víctima se ha determinado de esa manera y no hay nada que pueda cambiarla, a menos que el que está sufriendo la manipulación empiece a querer modificar la situación.
Sobre todo en las relaciones de pareja con una persona manipuladora, puede pasar mucho tiempo hasta que la víctima se da cuenta de lo que ocurre. Ésta no desea escuchar lo que le dicen sus seres queridos, cree que todo el mundo está equivocado, que la otra persona lo hace porque la quiere, que puede tomar sus propias decisiones, que no le tiene miedo, etc.
En algún momento, aún no está claro por qué, la persona que sufre las garras del manipulador se despierta de ese adormecimiento.
Imagina por un instante lo que realiza la araña con su presa: la envuelve en su tela, hasta que finalmente se alimenta de ella. Algo similar ocurre con los manipuladores y la energía positiva de su “presa”.
Más allá de decir que la víctima de un manipulador tiene carencias o problemas, debemos indicar que el perverso narcicista es quién necesita ayuda también.
Si bien en las relaciones todos nos complementamos, el que tiene más para perder es el manipulador, no el manipulado. Esto es así, ya que está “consumiendo” algo que la víctima tiene, como puede ser capacidad intelectual, bondad, carisma, solidaridad, autoestima, amistades, trabajo, salud, etc.
Siempre hablamos de las características de las personas manipuladoras y de cómo darnos cuenta si alguien nos está controlando, pero nunca ponemos en tela de juicio por qué esa persona reacciona de esta manera, qué es lo que está necesitando y de qué forma pide ayuda. No estamos con esto diciendo que no sea responsable o culpable de sus actos, sin embargo, habría que analizar qué traumas o problemas del pasado lo han llevado a actuar de esa manera o cuáles son sus necesidades más profundas.
Cuando un perverso narcicista se encuentra con alguien fácil de gobernar, es donde puede poner en práctica o depositar todos sus traumas. Sin ánimos de ofender a nadie, un manipulador actúa cuando la víctima lo permite. No siempre esto ocurre a propósito por parte del manipulado y hasta hay casos en los que el victimario tampoco se da cuenta.
El perverso envidia aquello que el otro tiene, por ello utiliza sus herramientas para tomárselo. La víctima no puede ver las maniobras usadas en su contra, está ciega de tan enamorada, no toma las acciones del otro como algo negativo, etc.
Pero esto puede influir en su mente y en sus emociones, lo mismo que ocurre con una gota que cae sobre una piedra, tras miles de años la termina desgastando.
Cuando un manipulador se encuentra con una persona segura de si misma, que sabe lo que le gusta, tiene sus propias opiniones sobre ciertas cosas y hasta le ha ocurrido algo malo con un perverso narcisista antes, cuenta con más armas a su disposición para no permitir que las telas de la araña lo envuelva.
Pero atención, que nadie está 100% inmune de este tipo de personalidades, ya que algunos saben a la perfección como hacer un “trabajo fino” y casi imperceptible, hasta que el otro se convierte en una marioneta.
Ten mucho cuidado con las personas con las que te relacionas. No es cuestión de sentirte amenazado o perseguido todo el tiempo, pero si de caminar por senderos seguros.
No dudes tampoco en hacer un trabajo de introspección para determinar, de manera objetiva, si puedes llegar a tener una personalidad que se puede manipular fácilmente.
Vía: lamenteesmaravillosa


EL PERDÓN

Cuando crezcas, descubrirás que ya defendiste mentiras, te engañaste a ti mismo o sufriste por tonterías.
Si eres un buen guerrero, no te culparás por ello,
pero tampoco dejarás que tus errores se repitan.
El perdón es una expresión de amor.
El perdón libera de ataduras que amargan el alma y enferman el cuerpo.
Muchos de nuestros intentos de perdón fracasan pues confundimos esencialmente lo que es perdonar y nos resistimos ante la posibilidad de empequeñecer los eventos ocurridos u olvidarlos.
El perdón no es olvido, no es olvidar lo que nos ocurrió.
No significa excusar o justificar un determinado evento o mal comportamiento.
No es aceptar lo ocurrido con resignación.
No es negar el dolor.
No es minimizar los eventos ocurridos.
No significa que estés de acuerdo con lo que pasó, ni que lo apruebes.
Perdonar no significa dejar de darle importancia a lo que sucedió, ni darle la razón a alguien que te lastimó. Simplemente significa dejar de lado aquellos pensamientos negativos que nos causaron dolor o enojo.
Creemos erradamente que el perdón debe de conducirnos inexorablemente a la reconciliación con el agresor.
Pensamos que perdonar es hacernos íntimos amigos de nuestro agresor y por tal motivo lo rechazamos.
No implica eso para nada, el perdón es UNICAMENTE PARA TI y para nadie más.
No hay que esperar que la persona que nos agredió cambie o modifique su conducta pues lo más probables es que ésta persona no cambie y es más, a veces se ponen hasta peor.
El perdón se basa en la aceptación de lo que pasó.
La falta de perdón te ata a las personas desde el resentimiento.
Te tiene encadenado.
El perdón se debe de realizar "sin expectativas" sin esperar que nada suceda.
Si esperamos que el agresor acepte su error, estaremos esperando en vano y gastando nuestro tiempo y nuestras energías en una disculpa que jamás llegará.
Si estamos esperando esta reacción, luego de haber perdonado, pues realmente no perdonamos de corazón pues seguimos esperando una retribución, un resarcimiento.
Seguimos anclados en el problema, en el ayer, queriendo que nos paguen por nuestro dolor.
Entonces no hemos perdonado, y quien tiene el control de nuestra vida es el EGO.
EGO que quiere a toda costa castigar o cobrar al agresor.
No existe nada ni nadie que pueda resarcir el dolor ocasionado en el pasado, el pasado no tiene cómo ser cambiado.
Ningún tipo de venganza o retribución podrá subsanar los momentos de tristeza y desolación que vivimos, lo mal que nos sentimos.
Al esperar una disculpa, que se acepte el error; nada de eso cambiarán los hechos, lo ocurrido en el pasado, sólo estaremos queriendo alimentar nuestro ego, nuestra sed de justicia mal enfocada.
La falta de perdón es el veneno más destructivo para el espíritu ya que neutraliza los recursos emocionales que tienes.
El perdón es una declaración que podemos y debemos renovar a diario.
Muchas veces la persona más importante a la que tienes que perdonar es a ti mismo por todas las cosas que no fueron de la manera que pensabas.
Perdonando desde nuestro corazón, logramos mirar los hechos tal y como sucedieron y luego decidimos dejarlos ir, dejarlos en el ayer.
Aceptamos que somos APRENDICES!
Que la lección ya se encuentra aprendida y que hemos logrado vencer las circunstancias negativas que nos tocaron vivir.
Perdona para que puedas ser perdonado.
Recuerda que con la vara que mides, serás medido...
PAULO COEHLO


EN EL CAMINO APRENDÍ

En el camino aprendí,
que llegar alto no es crecer,
que mirar no siempre es ver
ni que escuchar es oír
ni lamentarse sentir
ni acostumbrarse, querer…
En el camino aprendí
que estar solo no es soledad,
que cobardía no es paz
ni ser feliz, sonreír
y que peor que mentir
es silenciar la verdad.
En el camino aprendí
que puede un sueño de amor,
abrirse como una flor
y como esa flor morir,
pero en su breve existir,
fue todo aroma y color.
En el camino aprendí,
que ignorancia no es no saber,
ignorante es ese ser
cuya arrogancia más vil,
es de bruto presumir
y no querer aprender.
En el camino aprendí
que la humildad no es sumisión,
la humildad es ese don
que se suele confundir.
No es lo mismo ser servil
que ser un buen servidor.
En el camino aprendí,
que la ternura no es doblez,
ni vulgar la sencillez
ni lo solemne verdad,
vi al poderoso mortal
y a idiotas con altivez.
En el camino aprendí
que es mala la caridad
del ser humano que da
esperando recibir,
pues no hay defecto más ruin
que presumir de bondad.
En el camino aprendí,
que en cuestión de conocer,
de razonar y saber,
es importante, entendí,
mucho más que lo que vi
lo que me queda por ver…
RAFAEL AMOR


martes, 29 de marzo de 2016

LA ACTITUD
Hace mucho tiempo, una joven llamada Lili se casó y fue a vivir con el marido y la suegra.Después de algunos días, no se entendía con ella. Sus personalidades eran muy diferentes y Lili fue irritándose con los hábitos de la suegra, que frecuentemente la criticaba.

Los meses pasaron y Lili y su suegra cada vez discutían más y peleaban. De acuerdo con una antigua tradición china, la nuera tiene que cuidar a la suegra y obedecerla en todo.
Lili, no soportando más vivir con la suegra, decidió tomar una decisión y visitar a un amigo de su padre.

Después de oírla, el tomó un paquete de hierbas y le dijo:

- No deberás usarlas de una sola vez para liberarte de tu suegra, porque ello causaría sospechas. Deberás darle varias hierbas que irán lentamente envenenando a tu suegra. Cada dos días pondrás un poco de estas hierbas en su comida. Ahora, para tener certeza de que cuando ella muera nadie sospechará de ti, deberás tener mucho cuidado y actuar de manera muy amigable.

No discutas, ayúdale a resolver sus problemas. Recuerda tienes que escucharme y seguir todas mis instrucciones.

Lili respondió: - Sí, Sr. Huang, haré todo lo que el señor me pida.

Lili quedó muy contenta, agradeció al Sr. Huang y volvió, muy apurada, para comenzar el proyecto de asesinar a su suegra.

Pasaron las semanas y cada dos días; Lili servía una comida especialmente tratada para su suegra.

Siempre recordaba lo que el Sr. Huang le había recomendado evitar sospechas y así controló su temperamento, obedecía a la suegra y la trataba como si fuese su propia madre.

Después de seis meses, la casa entera estaba completamente cambiada. Lili había controlado su temperamento y casi nunca la aborrecía.

En esos meses, no había tenido ni una discusión con su suegra, que ahora parecía mucho más amable y más fácil de lidiar con ella.

Las actitudes de la suegra también cambiaron y ambas pasaron a tratarse como madre e hija.

Un día Lili fue nuevamente en procura del Sr. Huang, para pedirle ayuda y le dijo:

- Querido Sr. Huang, por favor ayúdeme a evitar que el veneno mate a mi suegra. Ella se ha transformado en una mujer agradable y la amo como si fuese mi madre. No quiero que ella muera por causa del veneno que le di.

El Sr. Huang sonrió y señaló con la cabeza:

- Lili no tienes por qué preocuparte. Las hierbas que le di, 
eran inocuas. Sólo intentaban mejorarte a ti. El veneno estaba en tu e, en tu actitud, pero fue echado fuera y substituido por el amor que pasaste a darle a ella.

En la China existe una regla que dice:
La persona que ama a los otros, también será amada.
LEYENDA CHINA

DEJAR IR

“Dejar ir” no significa dejar de cuidar, significa que no puedo hacerlo por otra persona.
“Dejar ir” no es aislarme, es darse cuenta que no puedo controlar a otro.
“Dejar ir” es admitir la impotencia, que significa que el resultado no esta en mis manos.
“Dejar ir” no es tratar de cambiar o culpar a otro, es sacar lo máximo de mi mismo.
“Dejar ir” no es cuidar, sino atender.
“Dejar ir” no es reparar, sino ser apoyo.
“Dejar ir” no es juzgar, sino permitirle a otro que sea un ser humano.
“Dejar ir” no es estar en el medio arreglando todos los resultados, sino permitir a otros que influyan en sus propios destinos.
“Dejar ir” no es ser protector, es permitir a otro que enfrente la realidad.
“Dejar ir” no es negar, sino aceptar.
“Dejar ir” no es regañar, reprender o discutir, sino buscar mis propios defectos y corregirlos.
“Dejar ir” no es ajustar todo a mis deseos, sino tomar cada día como viene y apreciarme a mi mismo en el.
“Dejar ir” no es lamentar el pasado, sino crecer y vivir para el futuro.
“Dejar ir” es Temer menos y Amar más.


LOUISE L. HAY

viernes, 11 de marzo de 2016

¿Por qué jugar con muñecas?

¿Por qué jugar con muñecas?

Muchos estudios psicológicos demuestran que los niños que han tenido la oportunidad de jugar con muñecas o muñecos de adultos serán niños cariñosos y solícitos con sus hijos.
Los muñecos y muñecas son juguetes simbólicos y al jugar con ellos, los pequeños imitan a los adultos, algo que les enseña nuevas actividades, les ayuda a mejorar sus habilidades y les lleva a ponerse en el lugar de los demás.

Jugando con los muñecos, a los niños y niñas les resulta más fácil expresarse. Y es que éstos son juguetes afectivos les ayudan a superar sus miedos.

Jugar con muñecos y muñecas favorece el desarrollo de los niños y niñas. Por eso hay que dejarles entretenerse con ellos libremente, sin cohibirles, para que puedan beneficiarse de todas las ventajas que les reportan estos entrañables compañeros de juegos. Al elegir un muñeco o muñeca debeis tener en cuenta que sea:


- Sencillo, para que le ayude a desarrollar la imaginación.
- Blandito y no muy grande, para que pueda abrazarlo bien.
- Lavable, para evitar que acumule microbios.
- Agradable, para que el pequeño quiera tenerlo como amigo.

Isabel Álvarez. Psicóloga

jueves, 10 de marzo de 2016

La verdadera felicidad

“De repente todo se vuelve tan simple que asusta. Perdemos las necesidades, se reduce el equipaje.

Las opiniones de los demás, son realmente de los demás, incluso si son sobre nosotros; no importa.

Abandonamos las certezas porque ya no estamos seguros de nada. Y no nos hace falta. Vivimos de acuerdo con lo que sentimos.

Dejamos de juzgar, porque ya no hay bien o mal, sino más bien la vida que eligió cada uno.

Finalmente entendemos que todo lo que importa es tener paz y tranquilidad, es vivir sin miedo, es hacer lo que alegra el corazón en ese momento. Y nada más.

Cuando descubrimos todo eso es cuando llega la satisfacción plena. La verdadera felicidad."

(Texto: Anónimo)

LO MEJOR ERES TÚ.


Lo mejor no es el pecho.
Lo mejor tampoco es el biberón.
Lo mejor no es que lo cojas.
Lo mejor tampoco es que lo dejes de coger.
Lo mejor no es que lo tumbes así.
Lo mejor tampoco es que lo tumbes del otro modo.
Lo mejor no es que lo tapes de una forma.
Lo mejor tampoco es que lo tapes de la otra forma.
Lo mejor no es que lo abrigues con esto.
Lo mejor tampoco es que lo abrigues con aquello.
Lo mejor no es que le des purés.
Lo mejor tampoco es que le des trozos.
Lo mejor no es lo que te dice tu madre.
Lo mejor tampoco es lo que te dice tu amiga.
Lo mejor no es que esté con una niñera.
Lo mejor tampoco es que vaya a la guardería o esté con abuelos.
Lo mejor no es que siga ese tipo de crianza.
Lo mejor tampoco es que siga ese otro estilo de crianza.
¿Sabes lo que realmente es lo mejor?

LO MEJOR ERES TÚ.

Lo mejor es lo que a ti te hace sentir mejor.
Lo mejor es lo que tu instinto te dice que es mejor.
Lo mejor es lo que a ti te ayuda a estar bien también.
Lo mejor es lo que te permite a ti ser feliz con tu familia.
Porque si tú estás bien, ellos reciben lo mejor. Porque lo mejor eres tú.
Porque si tú te sientes segura, ellos también se sienten seguros.
Porque si tú crees que lo estás haciendo bien, tu tranquilidad y felicidad les llega a ellos.
PORQUE LO MEJOR ERES TÚ.
Dejemos de intentar decir a cada madre / padre qué es lo mejor.
PORQUE LO MEJOR REALMENTE PARA TUS HIJOS ERES TÚ.